«Quienes no se digitalicen sufrirán un alto impacto en su negocio»

Columna de opinión de Thierry de Saint Pierre, presidente de ACTI, en La Tercera.

Se debe tomar muy en serio la transformación digital del Estado y de las empresas.

 

Estamos viviendo una crisis por COVID-19 que no teníamos prevista en ningún análisis de escenario de riesgo y que por lo mismo nos ha impactado brutalmente al no disponer de un plan previo de mitigación. Y esto ha impactado con mayor o menor fuerza a todos los sectores del quehacer nacional.

Como agentes de la industria siempre hemos impulsado la digitalización y la transformación digital en el más amplio sentido, y esta vez todos -también la industria TIC- tuvimos que reaccionar rápidamente para enfrentar los desafíos: nuestro país necesitaba con urgencia soluciones tecnológicas para mantener a los chilenos conectados, hacer frente a la teleeducación, al teletrabajo, la telemedicina y lograr que las empresas pudieran mantener su funcionamiento y su producción para satisfacer las necesidades del país. Tarea titánica para un escenario de pandemia completamente nuevo por su velocidad de propagación y alcance globalizado.

Pandemia de la que aún se tiene poca data y no se tiene aún claro cuál es la mejor estrategia de mitigación.

Para entender el escenario: según la Subtel, hoy en Chile hay 3,2 millones de conexiones de internet fija, 80% de esas son de fibra óptica; y un gran problema es que el 50% de los hogares de Chile no tiene internet fija. Tenemos 346 comunas en el país, y algunas tienen prácticamente el 100 por ciento de sus hogares conectados a internet y, en cambio, hay 50 comunas que tienen menos de uno de cada 100 hogares conectado. Todo esto lo planteamos porque sabemos que la tecnología y la conexión son pilares fundamentales para sobrevivir, trabajar, educar y hacer frente a esta crisis.

El teletrabajo es el que lleva la delantera y aquí hay un gran desafío si se piensa que un 52% de las empresas no lo había aplicado antes de la llegada del COVID-19 y que luego de estas pocas semanas un 82% de los trabajadores dice estar dispuesto a adoptar esta modalidad de manera permanente. Según un estudio de Digital Bank Latam, aplicado a 220 ejecutivos del sector financiero de Latinoamérica, incluido Chile, arrojó que el 14,1% dijo no tener cultura digital para enfrentar el teletrabajo. Preocupante. Y que el 37,2% cree necesario reforzar la cultura digital. Por lo tanto, tenemos aún tareas pendientes; y, sin duda, en este camino ayudará la nueva Ley de Teletrabajo que tenemos.

Además, hemos visto que para estar conectados y funcionando resulta esencial contar con toda la infraestructura TI disponible, poder manejar todas las «posibilidades» de la nube (cloud) y entender la importancia del alcance, capacidad y disponibilidad de las redes de comunicaciones, incluyendo en estas por supuesto internet. Solo éstas últimas semanas, ha aumentado el tráfico en las redes en cerca de un 30%. El uso de las aplicaciones también ha crecido: 67% para WhatsApp, 58% para Netflix y 47% para TikTok. Mientras que a nivel mundial, Teams ha llegado a tener 75 millones de usuarios al día, lo mismo que Zoom y Google Meet. Todas plataformas fundamentales para apoyara la sociedad en estos momentos.

Los desafíos son muchos. Debemos tomarnos muy en serio la transformación digital del Estado y de las empresas mismas; quienes no se digitalicen sufrirán un alto impacto en su negocio. En el tiempo que viene, se va a incrementar el trabajo remoto, la telemedicina, la teleeducación, el eCommerce, los e-services. Y todo esto impactará en una nueva cultura de empresa. Sin dudas, vamos a tener que asumir una sociedad más local y menos global físicamente, «Una nueva normalidad» a la que habrá que acomodarse.

 

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